La
salud mental de los niños es un aspecto muy importante en su desarrollo. Si su salud mental no es saludable, comienzan a manifestar problemas de
salud física, problemas de conducta e incluso dificultades académicas. Nuestro
colegio es consciente de ello, por eso creamos el espacio “Cuéntaselo a Mr.
Baylor”.
Los
niños, al igual que los adultos, necesitan expresar sus sentimientos,
preocupaciones, miedos o necesidades. Sin embargo, en muchas ocasiones, no
saben a quién contárselo o cómo expresarlo. Algunas veces, los niños deciden
confiar en un adulto y contarles lo que les sucede, pero si el adulto no
reacciona como el niño esperaba, la consecuencia es que el niño se cierra y ya
no quiere hablar de ello.
Con
frecuencia, los adultos de forma inconsciente, causamos malestar emocional a
los niños y les transmitimos mensajes erróneos. Esto sucede cuando nuestros
hijos o alumnos quieren contarnos algo, y nosotros les decimos que estamos
ocupados, o los escuchamos mientras hacemos otra cosa, o minimizamos lo que
sienten o necesitan, o nos reímos de lo que nos cuentan, o hacemos
comparaciones con sus hermanos, o les decimos que estamos ocupados con su
hermano o hermana menor, entre otros ejemplos.
En
estas situaciones, los niños aprenden que sus necesidades y sentimientos no son
tan importantes y ello les causa una fuerte sensación de soledad. ¿Sabías que 7
de cada 10 niños de educación primaria que van a hablar con el orientador del colegio
expresan que se sienten solos? Y esta cifra aumenta en la educación secundaria.
¿Os habéis preguntado por qué a los niños les es tan fácil conectar con y expresar afecto a los perros? Los perros escuchan a los niños con toda su atención y les dan afecto incondicionalmente. Además, pueden percibir cuando un niño se siente triste o preocupado, y en esas situaciones, su único objetivo es hacer sentir bien a ese niño.
En
nuestro colegio somos conscientes de ello. Por este motivo, la finalidad del espacio
“Cuéntaselo a Mr. Baylor” es la de crear un espacio seguro donde los niños se
sientan cómodos expresando sus sentimientos y contando sus necesidades. Mr.
Baylor, no solo los escucha activamente, sino que también está entrenado en
técnicas específicas para ayudar a los niños a sentirse mejor.
Al mismo tiempo, mientras los niños hablan con Mr. Baylor, nuestra orientadora puede darles estrategias y realizar seguimiento con ellos, y lo más importante, puede detectar problemas emocionales antes de que afloren.
Cada
vez son más los alumnos que están haciendo uso de este espacio y cuando se
sienten mejor, traen muestras de cariño y de gratitud a Mr. Baylor.